Ha llegado el momento tan esperado, ha instalado su nueva sauna y está listo para lanzarse a una experiencia de profunda relajación. Pero, ¡cuidado! Antes de empezar a disfrutar de los maravillosos beneficios para la salud que le ofrece su sauna, es esencial prepararla correctamente para su primer uso. Desde el calentamiento hasta la limpieza, vamos a detallar los pasos necesarios para optimizar su experiencia en la sauna.
Paso 1: Limpiar la sauna
Antes de calentar la sauna, límpiela a fondo para eliminar cualquier resto de polvo o suciedad resultante del proceso de instalación. Utilice un paño húmedo y una solución limpiadora suave para limpiar las superficies interiores, incluidos los asientos, las paredes y el suelo. Deje que se seque por completo antes de pasar al siguiente paso.
Paso 2: Ventilación
Una ventilación adecuada es esencial en una sauna. Asegúrate de que la ventilación o la ventana estén abiertas para que entre aire fresco durante el proceso de calentamiento.
Paso 3: Calentar la sauna
A continuación, es hora de calentar la sauna por primera vez. Encienda el calefactor de la sauna siguiendo las instrucciones del fabricante y ajuste la temperatura a unos 70-80 °C para una sauna tradicional o a 38-54 °C para una sauna de infrarrojos. Si ha optado por la versión más tradicional y ha comprado una sauna de leña, ponga la leña en la estufa y encienda el fuego, asegurándose de que la chimenea esté abierta para permitir una ventilación adecuada. Deje que la sauna se caliente lentamente hasta que alcance la temperatura ideal de unos 70-90°C.
Paso 4: Dejar actuar
Deje que la sauna funcione durante al menos una hora. Puedes dejar la puerta entreabierta para que se disipe cualquier residuo del proceso de fabricación.
Paso 5: Aumentar la temperatura
Transcurrida una hora, aumente la temperatura al máximo y déjela funcionar unas horas más. Este proceso ayuda a "sazonar" la sauna quemando los residuos.
Paso 6: Enfriamiento
Apaga la sauna y deja que se enfríe por completo.
Paso 7: Limpieza final
Una vez que la sauna se haya enfriado, límpiala de nuevo. Esta vez, friega el suelo y limpia el calentador, sobre todo si observas algún residuo.
Paso 8: Ajuste óptimo
Ahora su sauna está lista para su primer uso. Ajuste la temperatura y la humedad según sus preferencias personales. Un buen punto de partida son 70-90°C para una sauna tradicional y 38-54°C para una sauna de infrarrojos, con un nivel de humedad de entre el 10-20%. Recuerda que las preferencias de cada persona varían, así que no dudes en experimentar hasta encontrar el ajuste ideal para ti.
Ahora que su sauna está lista para ser utilizada, mantenerla en buen estado es esencial para su longevidad. ¡Para conocer todos nuestros consejos, lea el artículo "Consejos para mantener su sauna al aire libre" aquí en el blog!
Preparar correctamente su sauna para su primer uso le garantizará una experiencia mejor y más relajante. Con los pasos adecuados y un poco de cuidado, disfrutará de los muchos beneficios de su sauna durante muchos años.
Relájese en su nueva sauna